Como indicamos en la sección previa, la recomendación mas importante al dar formato en un texto en línea, es respetar las etiquetas semánticas del lenguaje HTML. Es decir, marcar en el código qué elementos son un título (h1), un subtítulo (h2) y sucesivamente hasta el h6; y diferenciarlas de aquellas partes que son párrafos (p) y se separan entre sí con un punto aparte.

En el editor de Moodle, tenemos 3 opciones para encabezados que corresponden a las etiquetas h3, h4 y h5 del HTML, porque h1 y h2 están reservadas a otros componentes del aula:

  1. Encabezado largo
  2. Encabezado medio
  3. Encabezado pequeño
Por ejemplo:

Esto es un título (encabezado largo) (h3)

Esto es un subtítulo (h4)

Esto es un sub-subtítulo (h5)

Esto es un texto de párrafo (p) que está pensado para apartados más extensos. Un punto y aparte separa los distintos párrafos entre sí. Es el formato por defecto de lo que escribimos en este editor. 

Estilos gráficos

Para facilitar la tarea de preparación de los componentes textuales, disponemos de un conjunto de estilos gráficos en el aula virtual que han sido pensados para usos frecuentes en la tarea de creación de recursos educativos digitales. Sirven para aplicar algunas definiciones gráficas de color, borde, tipografía y tamaño a componentes tales como:

  • Citas literales de autores/as.
  • Ejemplos (un marco para distinguir un texto del resto).
  • Destacado (un marco con fondo de color).
Los nombres son sugerencias de uso, pero podrían aplicarse de otros modos.
Ejemplos de uso:

Estilo Cita de autor/a

Lectura en pantalla: el patrón en F


Con el paso del tiempo, en el marco de los hábitos de lectura digital, se han cristalizado diversos patrones. El patrón F de lectura, llamado así por el recorrido visual que realiza el/la usuario/a por la web, refleja el patrón de conducta que sigue la mayoría de internautas:

  • En un primer momento, el/la usuario escanea el comienzo de la página en sentido horizontal, incluyendo en este examen rápido el primer párrafo. Es así como se origina la línea superior de esta “F” imaginaria.
  • A continuación, la mirada hace un recorrido vertical por la parte izquierda del texto, durante el cual el/la usuario/a lee las primeras palabras de un párrafo y salta a la línea siguiente (está escaneando el texto). Los elementos en la parte derecha de la pantalla se ignoran por completo inconscientemente.
  • Tras esta primera lectura “por encima”, el/la usuario/a busca información relevante para él. Si identifica palabras clave, la mirada vuelve a girar a la derecha en sentido horizontal (generando la segunda línea horizontal de la F).
  • En lo siguiente, la mirada permanece en el lado izquierdo de la pantalla y continúa hacia el final de la página en sentido vertical de arriba abajo.
El denominado patrón en F de lectura en la web tiene su origen en la psicología de la conducta y desciende de un patrón de lectura largamente entrenado fuera de la red. Sobre el papel, las lenguas latinas también se leen de izquierda a derecha y de arriba hacia abajo, con la diferencia de que en la web ya no se lee palabra por palabra, sino que el/la lector/a salta de línea en línea y atiende, sobre todo, a las palabras que les dan comienzo.

Estilo Ejemplo
En Internet se lee de una forma diferente que en papel. Esto se debe a diferentes motivos. Por un lado, la lectura en pantalla se ralentiza hasta en un 25 por ciento, y, por el otro, el internauta se ve confrontado con una cantidad desproporcionada de información. Ambos factores han provocado que el usuario-lector/a se haya vuelto más impaciente. Ya no hay apenas nadie que recorra línea a línea un texto online, sea una noticia o la descripción de un producto, como sucede con una buena novela. La lectura digital implica más bien escanear, “hojear” y leer los textos en diagonal, algo sin duda a tener en cuenta en el diseño de páginas web y de campañas de contenido.

Fuente: Digital Guide IONOS 2017

Estilo Destacado
Noten que el tamaño de la tipografía es más grande, por lo que se recomienda para textos breves.
Los usuarios en la Web no leen, o por lo menos no lo hacen de la misma forma secuencial que cuando tienen entre manos un periódico, un libro, un artículo o un cómic. Los usuarios tienen necesidades y objetivos, metas que alcanzar, y saben que la forma de conseguir dichas metas no suele ser dedicando largos ratos a cada nodo web que visitan, leyendo de principio a fin sus contenidos y enlaces. El usuario, en una página, hará clic sobre el primer enlace que crea puede llevarle a lo que busca, necesita o pudiera interesar. Eso quiere decir que muchos de los contenidos y enlaces de ese nodo ni siquiera serán vistos por el usuario.

Hassan Montero, Y. (2002)